Empezar a leer literatura clásica es uno de los puntos que más se repiten en nuestras listas de propósitos lectores. Sin embargo, los prejuicios y los planes de lectura que se siguen en el colegio han asentado la idea de que los clásicos se leen más por obligación que por gusto, y, por eso, tenemos la sensación de que estos libros, aparentemente largos y complejos, no son para nosotros.
¡Pero nada más lejos de la realidad! Hay clásicos accesibles para todo tipo de lectores: si te gusta la literatura romántica, Mr. Darcy te enamorará tanto como los personajes de Elísabet Benavent y, si prefieres el thriller, devorarás los libros de Sherlock Holmes tan rápido como los de Javier Castillo. En este post hemos recopilado una serie de consejos que te ayudarán a perder el miedo a los clásicos:
Empieza con clásicos breves
Muchas veces, asociamos la literatura clásica con Grandes Novelas Complejas (así, en mayúscula) de miles de páginas y con un lenguaje tan enrevesado que no está a nuestro alcance. Sin embargo, la realidad es muy distinta: un clásico es, sencillamente, un texto que presenta unos valores atemporales, con los que personas de distintas generaciones pueden sentirse identificadas.
Por eso, hay clásicos de todo tipo: poesía, textos de no ficción, cuentos cortos… Muchos clásicos no ocupan más de 150 páginas y brillan tanto como los que tienen más de mil. Libros como Peter Pan, El cuervo o Alicia en el País de las Maravillas te ayudarán a mantenerte a flote en tus primeras incursiones en la lectura de los clásicos y te darán ese empujón que necesitas para ir sumergiéndote, poco a poco, en las grandes joyas de la literatura universal.
Escoge una buena edición
Si eres principiante en el mundo de los clásicos, es importantísimo que busques una buena edición del título que hayas escogido. Aspectos como el diseño, la calidad de la traducción, el cuidado de las ilustraciones o la comodidad del formato son cruciales, y pueden marcar la diferencia entre engancharse a la literatura clásica o perder el interés para siempre en estos libros. Una buena edición debe destacar por encima de los demás libros en una estantería, presentar un diseño acorde con la personalidad del título y, en definitiva, ponerlo todo a disposición del lector para que disfrute del placer de la lectura en todos los sentidos.
En nuestro catálogo, encontrarás propuestas de clásicos muy diferentes que, sin embargo, guardan algo en común: todos ellos tienen una edición cuidada al detalle, para que la lectura se convierta en una experiencia emotiva y única.
Comparte tu lectura
Los libros se disfrutan más cuando se comparten con amigos. Participar en una lectura conjunta puede darte el pequeño empujón que necesitas para hincarle el diente a ese clásico que tienes pendiente desde hace tiempo, y pequeños detalles como poder comentar lo que sucede en la historia o marcar metas de lectura cada día agilizará el proceso. Antes de que te des cuenta, habrás terminado ese clásico ruso que tanto te imponía al principio.
Si no consigues engañar a ningún amigo para que te acompañe, siempre puedes recurrir a los clubs de lectura online. En el nuestro, leemos un clásico cada mes y nos reunimos vía Zoom para comentarlo; puedes consultar toda la información en nuestro perfil de Instagram. Los últimos libros que hemos elegido son Bartleby, el escribiente, Peter Pan y La dama de las camelias.
Conoce el contexto de la obra
Unpopular opinion: es mejor ver la peli antes que leer el libro. ¡Al menos en los clásicos! Si has empezado a leer un clásico y notas que ciertas normas sociales de la época o de la ambientación se te escapan, ¡no te agobies! Para disfrutar de la historia, te recomendamos documentarte sobre el contexto antes de leer. No hace falta que consultes enciclopedias o que lo estudies en profundidad: puedes informarte leyendo artículos en Internet, viendo vídeos en YouTube o escuchando algún podcast; ¡tienes toda la red a tu disposición!
Si no te dan miedo los spoilers, la mejor forma de sumergirte de lleno en los clásicos más densos es ver la historia en la gran pantalla. Muchos clásicos como El gran Gatsby o Anna Karenina cuentan con adaptaciones recientes, que te aportarán todo lo necesario (conocimiento del contexto, referencias de la trama y los personajes, etc.) para que abordes la lectura de la novela desde una posición muchísimo más cómoda.
Dale una oportunidad a las antologías y los relatos cortos
La oferta de clásicos de la que disponemos es inabarcable: hay tantos autores que es muy difícil saber cuál de todos se va a ajustar más a nuestros gustos. Por eso, es importante llevar a cabo un pequeño acercamiento a la obra de los escritores que más nos interesan, para empezar con buen pie cuando nos sumerjamos en sus historias. Para conseguirlo, te recomendamos que, antes de embarcarte en la lectura de las novelas más conocidas, investigues los relatos cortos del autor que hayas elegido: así, te familiarizarás con su estilo y sabrás si lo que tiene que contarte encaja con lo que buscas.
Antologías como Relatos para amantes de los libros, Antología de relatos románticos apasionados o Antología de cuentos cortos recorren geografías y épocas distintas para reunir en un único volumen los mejores textos de autores de todo el mundo. Estos libros son la opción perfecta para tener una primera cita con distintos autores hasta encontrar el match perfecto para ti.
¿Te gustaría añadir algún consejo más a lista? Puedes compartir tus tips con nosotros o contarnos cuál fue ese título que te abrió las puertas de la literatura clásica a través de nuestras redes sociales. ¡Felices lecturas!